martes, 27 de diciembre de 2011

Algunos cambios para el nuevo año

Llevaba más de un mes sin publicar. No será porque no me han pasado cosas en todo este tiempo, porque cosas que contar hay para rato. Alguna que otra era buena, o al menos lo parecía, pero luego resultó ser todo lo contrario (aunque en el fondo era lo mejor). Sí, es todo un poco contradictorio.
El invierno ha sido siempre, con diferencia, la estación del año que menos me ha gustado. Está bien eso de dormir acurrucado entre las sábanas, ocho horas (ahora de "vacaciones") del tirón, pero, salvo por eso, lo borraría del calendario. Y desde este año creo que mi aversión por él será mayor y más justificada. Es más, este año he llegado a decir que "Odio la Navidad", cosa que hasta ahora ni se me habría pasado por la cabeza decir. Sí, la "odio" por diversos motivos, como el hecho de que muchas familias solo se reúnan en estas fechas, aunque si nos ponemos así también podría decir que odio celebrar (o que se celebren) los cumpleaños o la primera comunión, ya que ambos son casos muy similares. También la "odio" porque algo que en su día se concebía como una celebración religiosa hoy no es más que puro negocio. Pero no, las verdaderas razones van más allá (y no las citaré aquí, al menos de momento).
Hace unas semanas me propuse empezar a buscar trabajo. ¡Necesito dinero! Sí: NECESITO. Así que, hace como dos semanas, me levanté temprano un día y me fui al centro a repartir currículums: en McDonalds, Burguer King, Pans&Company, Lefties, Zara... vamos, que me recorrí medio centro, entrando en sitios muy dispares entre sí, como véis. Todo intento es bueno, ¿no? De momento no me han llamado de ningún sitio... quiero pensar que después de Navidades o un poco después lo harán, porque sería triste que no me cogieran ni en McDonalds, por Dios.
Esta tarde fui al gimnasio para informarme, que a ver si me apunto para la próxima semana. El año pasado estuve en otro (en el que me clavaban 50 €/mes y tenía que turnarme con los demás en cada máquina...), pero me acabé borrando por falta de tiempo. Este año, de momento (que solo voy dos días/semana a la univ.) parece que tengo más tiempo, así que solo falta tener fuerza de voluntad. Espero no acabar agobiándome... La semana pasada estuve en otro informándome, pero la tía que me atendió era una machorra incompetente que me trató de forma seca, como si tuviera prisa en despacharme, así que le dije: "Ya vendré el lunes" (enseguida) y no he vuelto a pisar por allí. Además, según leí opiniones en internet, casi todas las máquinas están en mal estado y no las reparan, así que con eso terminé de decidirme. Prefiero pagar los 18 € más que cuesta este y que me traten de forma profesional y las máquinas estén perfectamente. Además, este tiene de todo, incluso sauna y masajes (esto último se paga aparte), y el otro solo tenía "sala de musculación", como rezaba el letrero que daba entrada al gimnasio.
Pues esto es, a grandes rasgos, lo que ha pasado en mi vida en este tiempo, principalmente. ¡Seguramente me deje cosas en el tintero, pero es que me ha entrado sueño y debería ir acostándome ya para aprovechar mañana el día!